Un lugar más que peculiar y nombrado a lo largo de la historia, se trata de Seixo Branco, o Piedra blanca en Castellano, una veta de roca blanca que desciende serpenteando por el acantilado hasta el mar.

La zona no solo se diferencia por esta peculiaridad geológica sino que su ubicación también la ha hecho de ella un lugar de vigilancia y orientación.

Aparcamos al final de un camino entre casas, donde una señal nos prohibirá la continuación.

El lugar carece de aparcamiento, solo podremos encontrar el espacio disponible de las cunetas.

Desde aquí el camino se convierte en una pista de tierra asombrada en algunos puntos por eucaliptos, la pista se extiende a lo largo de 600 metros más o menos donde podremos encontrar los restos de una batería militar de 1640 con proyección de exploración y tiro para iluminar objetivos. Estas instalaciones fueron abandonadas después de la Segunda Guerra Mundial.

A mano izquierda del camino y sobre un colina podremos ver los restos de un Búnker que obtiene las mejores vistas hasta Ares, Faro Prioriño, Faro de Mera y la Torre de Hércules.

A mano derecha y con un cartel indicativo se encuentra esa veta de pórfido granítico blanco, muchos lo confunden con cuarzo por sus blancos marfil que se avistan desde kilómetros mar adentro. Por ello, los marineros es orientaban por esta línea blanca que, junto con el Islote de A Marola conforman el límite entre las aguas tranquilas y el mar abierto.

Un refrán marinero hace referencia al lugar con las sabias palabras que dicen, ” Quen pasou a Marola, pasou a Mar toda” ( Quien pasó A Marola, paso todo el mar.)

Los acantilados y las vistas merecen un paseo a mayores por la zona.

Recordad que podéis contribuir a nuestro trabajo en la sección de contactos y cualquier problema que pueda surgir con la ruta, ruego me la hagáis saber para rectificar los datos. Un saludo y a rodar.

Por aquí os dejo el mapa listo para descarga de la Ruta a Seixo Branco.

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